Don Enrique Guillermo Hood nació en la provincia de Buenos Aires el 23 de julio de 1905, allí cursó sus estudios completos. Se casó y tuvo una hija. Jubilado como Gerente general de la Empresa SIAM, quiso ayudar a sus sobrinos en su empresa alimenticia que distribuía en todo el país, por ese motivo, vino a Catamarca donde conoció y entabló una linda amistad con el Profesor Juan Carlos Roldán.
Se enamoró de nuestra provincia y por ello adquirió una casa en la calle Rojas 238, con la intención de radicarse en esa propiedad con su señora e hija. La vida le jugó una mala pasada, perdió a su Sra. esposa y luego enfermó su hija por lo que no pudo cumplir su propósito.
En esta circunstancia y, amparándose en la amistad de Don Enrique con su padre, la Sra. Elizabeth Roldán le alquiló el departamento del primer piso para vivir con su hijo, con el compromiso de cuidar la casa. Así fue que nació la idea de atender a niños pequeños cuando sus padres trabajaran. Les solicitó a Don Enrique y a su hija Ana que le permitieran usar las dos habitaciones de la planta baja que se encontraban al fondo, en el patio interno de la casa para tal fin. De este modo nació la Guardería “Elizabeth Garden” con seis pequeños, el 24 de septiembre de 1984.
A fines del año 1987, vinieron de visita Don Enrique y su hija, y al ver el crecimiento de la guardería que ya contaba con 80 alumnos, tuvieron la inmensa generosidad de donar la casa para que funcionara el colegio, que en el año 1988 pondría su piedra basal con la sala de 5 años obligatoria. Aquella guardería, se transformó así en Jardín de Infantes.
Anualmente continuaron sus visitas, gozaba rodeado de los pequeños que le entregaban su inocente cariño al “abuelo” (como lo llamaban). No sólo les regaló su amistad, sino que hasta su muerte acaecida el 19 de junio de 1995 en la Provincia de Buenos Aires, demostró su generosidad en forma permanente puesta de manifiesto con donaciones de mobiliarios, útiles, didácticos, bibliografía, etc. Es por esta gran generosidad sin límites que se le ha honrado imponiendo su nombre a la Institución que hoy es reconocida y goza de prestigio en la sociedad.
Es por ello que nuestra institución, toma el mes de junio como “mes solidario”, en homenaje a nuestro benefactor quien fuera un claro ejemplo de ello.